el fracaso industrializador nadal y gabriel.Dos sectores líderes en industrialización en el siglo XIX: siderurgia y textil de algodón.
Siderurgia: inputs: carbón y mineral de hierro, que determinan su localización. De Málaga y Sevilla a Asturias y Vizcaya.
Demanda: herramientas del campo, máquinas y ferrocarriles.
Textil: materia prima: algodón en rama (importado); energía: carbón o un curso de río. Se desarrolla ante todo en Cataluña.
Demanda: nivel de vida del país, que en gran parte depende del sector agrícola.
1830-1860: Crecimiento sostenido. 1860-1910: ralentización. Varias causas:
1- Revolución agrícola tardía, lenta y sólo parcial. Desamortización no logra sus objetivos por ruina de la Hacienda. Demanda permanece muy baja.
2- Minas en manos extranjeras, industrialización basada en la transformación de minerales no tiene lugar (salvo Vizcaya), por desinterés de empresas foráneas.
3- Carbón caro por su difícil explotación y de baja calidad. España importa más de la mitad de sus necesidades, aumentando su precio.
4- Facilidades para construir ferrocarriles: empresas extranjeras, unidas a intereses siderúrgicos de sus lugares de origen: impiden desarrollo de las fábricas españolas.Críticas a la tesis de Nadal=1- Nuevas mediciones de los rendimientos de la agricultura. Creció, no hubo estancamiento. El campo español no fue culpable: la demanda de productos textiles y siderúrgicos también creció.
2- La industria siderúrgica no habría estado preparada si se le hubiera concedido el mercado de los FFCC: no habría respondido: culpa de la Oferta.
3- Las inversiones extranjeras en FFCC no impidieron que una buena parte del ahorro español fuera a parar a éstos. No todos los ferrocarriles estuvieron en manos de extranjeros
La tesis de Gabriel Tortella Déficit público: factor más importante para entender el retraso económico español.
El sistema bancario actuó como apéndice de un Estado en continuos apuros financieros. También apoyó a los FFCC, y los títulos de compañías industriales y manufactureras quedaron abandonados.
Como consecuencia, hacia 1865 la inversión en FFCC era 6 veces mayor que en industria. (1.500 millones frente a 250 aprox.).
Expediciones militares a las 4 esquinas del planeta (Indochina, México, Marruecos y Perú) para recuperar prestigio perdido.
Vuelta al endeudamiento, arrastrando a la economía e hipotecando el desarrollo industrial.
Falta de verdaderos empresarios: tradición española del rechazo al trabajo y a la innovación económica, que proviene de una cultura de siglos anquilosada en mentalidades antiguas y conservadoras, y en una falta de educación moderna del pueblo español, que sería muy inculto.
Además, grupos de presión lograron del Estado una elevada protección, la más alta de Europa. Sin competencia extranjera no hubo presión para reducir costes, y por ello:
los precios fueron muy altos y como consecuencia la demanda no fue todo lo alta que podría haber sido;
se produjo un anquilosamiento tecnológico.critica a la tesis de gabriel=1- Los FFCC fueron imprescindibles. Crearon y consolidaron un mercado interior, indispensable para el desarrollo industrial. No fue un gasto inútil, a pesar de ser deficitarios, debido a las externalidades.
2- Claro que hubo empresarios, con comportamientos idénticos a los de cualquier otro país. Pero no se han estudiado suficientemente.
3- Educación y modernización económica no van en absoluto unidas. No se industrializaron primero las regiones que tenían tasas de alfabetización y enseñanza primaria más altas.
¿Por qué existe tanta oposición entre las tesis de Nadal y Tortella? Porque la enseñanza que se saca de una y otra es opuesta:
Si se hace caso a Nadal, el Estado, mediante aranceles y otras medidas, debería haber potenciado la demanda y reservado ésta para la industria interior.
Si se hace caso a Tortella, la intervención del Estado fue nefasta al gastar sus escasos recursos en subvencionar los FFCC y potenciar que el ahorro nacional lo hiciera también.
Más Estado en uno, menos Estado en otro. Estas distintas enseñanzas son aplicadas al servicio de distintas ideologías