Los golfos y las bahías son entrantes profundos del mar en la costa. Los acantilados son costas que penetran en el mar con una fuerte pendiente. En ellos la erosión del mar puede crear cuevas, arcos marinos y farallones. Las playas son extensiones planas y poco pendientes de arena, grava o guijarros localizadas al nivel de la costa. Las rasas son plataformas de erosión marina paralelas a la costa que han quedado elevadas sobre el nivel del mar. Las rías son entrantes costeros estrechos que resultan de la invención del último tramo de un valle fluvial por el mar. Las marismas son llanuras de fango que se forman en bahías bajas y que se rellenan con los sedimentos aportados por los ríos que las atraviesan. Las flechas litorales son barras de arena que prolongan una costa rectilínea y arenosa hacia el interior de una bahía. Las albuferas son lagos costeros salados separados del mar por un cordón de arena que cierra una bahía. Los tómbolos son barras de arena que unen islotes rocosos a la costa. Pueden ser dobles quedando una laguna entre ambas. Los deltas son salientes costeros formados cuando un río aporta más sedimentos de los que puede redistribuir el mar. Las dunas son montículos de arena típicos de las costas arenosas que se forman por el transporte y la acumulación de arena por el viento.
Los conos volcánicos son elevaciones cónicas abiertas en la cima originadas por el amontonamiento de materiales volcánicos alrededor de la boca de misión. Las calderas son grandes cráteres circulares que se originan por la explosión de un volcán (caldera de Bandama), o por su hundimiento (caldera de Las Cañadas). Los malpaíses son terrenos abruptos formados al solidificarse rápidamente las coladas de lava en forma de ondas o bloques. Los diques y los roques son conductos de emisión de magma, rellenos de lava solidificada, que han quedado al descubierto. Los barrancos son valles estrechos, escarpados y de corto recorrido. Los acantilados suelen medir entre 100 y 500 metros y son propios de los macizos antiguos. Las playas tienen un escaso desarrollo. Dependiendo del litoral, el viento forma amplias extensiones de dunas (Maspalomas).